Hay quien dice que en el primer ciclo de educación infantil nos dedicamos principalmente a cambiar pañales, y en parte tienen razón, pero lo que no logro a entender es porque lo dicen con cara de "desprecio", como si quitar pañales a los niños-as fuera un mal trabajo.
Ayer mismo, mientras cambiaba un pañal a una niña, encontre la razón perfecta por la que, en el ciclo 0-3 años, es tan importante subir a un niño al cambiador, quitarle el pañal, hablarme en el proceso mirandole a los ojos......
Resulta que la niña, digamos que su nombre es Patricia, es de caracter contenido, le cuestra expresar sentimientos y emociones, jamás la ves reir y sonreir, no dá abrazos ni besos.
Mientras le cambiaba el pañal, le cante una canción y se creo una burbuja a nuestro alrededor, sin que nadie (ningún niño principalmente) nos "molestara", le pregunte si se lo había pasado bien a lo que ella contesto con un leve movimiento vertical de su cabeza, después le dije que yo sabía sonreir y que solo consistía en enseñar los dientes y pensar algo bonito, y se lo enseñé. Le pregunté si ella sabía, le mire con espectación y espere. En un intento de sonreir, Patricia, me enseño los dientes superiores, le aplaudí, y le dí un beso...... y como respuesta ella me abrazó y me dio un beso SONORO!!! .
Me pareció un momento precioso, único, un principio de un largo camino......
Cuando trabajas en educación infantil ( sea el ciclo que sea) hay miles de situaciones que se escapan de entre los dedos cada día.
Este blog intenta resumir diariamente los comportamientos infantiles y los mios propios como profesional de la educación, y aprender de sus logros, frustracciones, deseos, enfados.... y de mis errores.
Laberinto de Susurros hablará de sonrisas, de mordiscos, de miradas, de caricias, de pellizcos, de abrazos, de besos.... todo aquello que por ser susurros y no gritos, se quedan estancados en el olvido.
Espero que os guste.
Este blog intenta resumir diariamente los comportamientos infantiles y los mios propios como profesional de la educación, y aprender de sus logros, frustracciones, deseos, enfados.... y de mis errores.
Laberinto de Susurros hablará de sonrisas, de mordiscos, de miradas, de caricias, de pellizcos, de abrazos, de besos.... todo aquello que por ser susurros y no gritos, se quedan estancados en el olvido.
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